La diputada Martha Edith Moreno Valencia, integrante del grupo parlamentario del Partido MORENA formuló un punto de acuerdo para que se exhorte a la Secretaría del Migrante y Enlace Internacional, a fin de que brinde un informe detallado de los programas que actualmente tiene en operación o implementará para lograr un efecto multiplicador de las remesas y un beneficio a las familias y ciudadanos guanajuatenses en el extranjero y en el estado.

De igual manera, para pedir a la Secretaría de Seguridad Pública que refuerce los mecanismos y medidas de seguridad permanentes enfocados a prevenir y proteger los derechos humanos de los migrantes mexicanos y extranjeros que transiten por nuestro territorio.

Al hablar sobre las consideraciones del documento, la congresista manifestó que los guanajuatenses que se encuentran indocumentados en Estados Unidos de Norteamérica han quedado en una precaria situación a raíz de la COVID 19, al no contar con cobertura médica, trabajar en empleos inestables, sin beneficios y que la gran mayoría han quedado fuera de los apoyos de ayuda enviados por el Departamento del Tesoro, pese a que muchos de ellos pagan impuestos.

Pese a esa situación, dijo, los migrantes no dejan de dar la cara y apoyar los ingresos del país, a través de las remesas que, desde el extranjero, envían a sus familias. Agregó que, de acuerdo con cifras del Banco de México, el país ocupa el tercer lugar mundial en la recepción de remesas con 52.7 millones de dólares, solo detrás de China e India.

Moreno Valencia mencionó Guanajuato recibió en 2021, 4 mil 308 millones de dólares por concepto de remesas, lo que representó un incremento de 24%, es decir, 840 millones de dólares más respecto al 2020, lo que representa una entrada de 11.8 millones de dólares al día; y que, durante la última década, según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía, la entidad recibió 557 mil inmigrantes llegados de diferentes estados, mientras que 647 mil se desplazaron del estado.

También se refirió a la situación que enfrentan muchas familias que deciden migrar y dejan a sus hijos menores al cuidado de otras personas, y después éstos buscan reencontrarse con sus padres, para no llegar muchas veces a su destino.

“Debemos garantizar las condiciones de seguridad y tránsito de los migrantes, en apego irrestricto a los derechos humanos. Seamos humanitarios y brindemos a nuestros hermanos centroamericanos el trato que desearíamos para nuestros compatriotas en los Estados Unidos. Es necesario y urgente, trabajar de inmediato en un plan estratégico y de acción para atender esta crisis humanitaria que están viviendo hermanos de otros países”, enfatizó la congresista.

Finalmente, argumentó que hay programas y acciones de gobierno en torno al tema y que la operatividad de ellos mismos no podía funcionar bien por varios motivos, el principal era la a falta de coordinación interinstitucional que incorpore la participación social de las familias como parte medular de la implementación de las políticas en la materia.

“Resulta prioritario conocer a detalle los programas que actualmente se tienen en operación o si se diseñará un programa en el cual el dinero que nuestros migrantes envían a sus familias tenga un impacto en sus comunidades y se vea reflejado en el bienestar de sus familias y su entorno”, concluyó la diputada.

El punto de acuerdo fue turnado a la Comisión de Atención al Migrante para su dictaminación.