El primer ministro de Japón, Yoshihide Suga, aseguró este lunes que su país sigue comprometido con la celebración de los Juegos Olímpicos previstos para el próximo julio, pese a que atraviesa su tercera y peor ola de COVID-19, que afecta especialmente a Tokio. “Llevaremos a cabo los preparativos con la determinación de adoptar todas las medidas posibles contra la infección y celebrar una competición que brinde esperanza y coraje a todo el mundo”, añadió el mandatario.

Las declaraciones de Suga sobre los Juegos están en línea con la postura mantenida por el país hasta ahora y se producen en un momento de renovada preocupación por el futuro de la cita olímpica a seis meses de su celebración, prevista para el 23 de julio, tras una serie de comentarios a nivel nacional e internacional que han generado incertidumbre.

Japón ha experimentado un preocupante aumento de casos de COVID-19 desde noviembre que llevó al gobierno a declarar desde el 8 de enero un segundo estado de emergencia que afecta actualmente a 11 de las 47 prefecturas del país, en las que se concentra más de la mitad de su población y en torno al 80 por ciento de los contagios contabilizados. Alrededor del 40 por ciento de los 328 mil 294 casos y cuatroo mil 501 muertes vinculadas al patógeno (que excluyen a las del crucero Diamond Princess) se han contabilizado en el último mes. Solo en Tokio las autoridades locales informaron hoy de mill 204 positivos más, la segunda cifra más alta revelada un lunes.