Guanajuato, Gto., a 05 de octubre de 2020.- Con entusiasmo y con el compromiso de impulsar la ciencia, el Dr. Daniel Chávez Valenzuela, profesor e investigador del Departamento de Física de la División de Ciencias e Ingenierías de la Universidad de Guanajuato (UG), es promotor del laboratorio de Superconductividad Aplicada, una nueva área de investigación dentro de la Máxima Casa de Estudios del estado, que pretende acercarse a las y los estudiantes como una nueva alternativa.
La formación del académico con relación al área de superconductividad aplicada, magnetos superconductores y la producción de campos magnéticos especializados lo ha llevado a emprender este proyecto en colaboración con el Dr. Mauro Napsuciale Mendivil, con la meta de probar soluciones tecnológicas. Asimismo, se busca fomentar las colaboraciones con otras universidades nacionales e internacionales y fortalecer los proyectos estudiantiles.
Actualmente, en este laboratorio que se encuentra en proceso de consolidación, trabajan en nueve proyectos de investigación, de los cuales uno se trata de un – Bio-estimulador magnético – que está en trámite de patente con la UG.
A este proyecto se suman el estudiante Giovanni García Valdivia, alumno de la Maestría en Física en la UG y el Dr. Gustavo Basurto Islas, quien trabaja en neurociencias y desarrollan una investigación sobre los efectos de campos magnéticos y cómo éstos afectan a la inhibición de una proteína que se relaciona con el Alzheimer.
“Tratamos de crear un dispositivo que permitiera al Dr. Basurto hacer estudio de los campos, atacando células que, intencionalmente, están relacionadas con el Alzheimer. […] La tarea era crear un dispositivo que nos permitiera tener una mayor cantidad de formación de campos magnéticos […], con condiciones muy específicas para realizar la investigación: temperatura controlada, control de atmosfera, presión, humedad, y, no sólo eso, sino unos campos magnéticos no uniformes que se llaman vorticiales muy complejos”, señaló el académico.
Además, afirmó que en el mercado no hay algo similar al Bio-estimulador magnético, ya que ninguno caracteriza perfectamente el campo magnético en toda distribución espaciotemporal, tampoco dan la calidad del campo y no ofrecen calidad de opciones controladas de temperatura. La característica anterior es un punto primordial para ese tipo de muestras pues, como refirió el Dr. Daniel Chávez, las células fallecen a los cuarenta grados.
Al respecto, enfatizó que el Bio-estimulador magnético UG será una herramienta fundamental no solo para aplicaciones terapéuticas, sino también para estudios de biología básica.
El Dr. Chávez Valenzuela hizo también un llamado a la colaboración de las diferentes áreas de la ciencia para la superconductividad aplicada, pues expresó que los campos magnéticos permean áreas como la biología, química y otras más.
Mencionó que este desarrollo tecnológico es algo que requiere tiempo, esfuerzo y gente altamente especializada. Por ello, trata de dar a sus estudiantes la cultura de patentar: “es muy importante el desarrollo tecnológico en el país y también la apropiación, el conocimiento y defender lo que se hace en bien de la universidad”. Hasta ahora, tienen 9 patentes, pero todos los proyectos en los que están trabajando son patentables “porque son descubrimientos nuevos de aplicaciones novedosas”, resaltó.
Cabe señalar que el Dr. Chávez a su vez mantiene una colaboración con la Universidad de Texas A&M, en la que ha firmado otra patente que consiste en una nueva alternativa viable para la producción de reactores nucleares tipo “Tokamak”. Esta colaboración une a científicos de distintas áreas: partículas, aceleradores, neurociencia y a un estudiante de ingeniería física. “Todos comprometidos con el desarrollo tecnológico en la universidad, señaló el científico.