Debido al incremento de las hospitalizaciones por coronavirus en el Valle de México, Ciudad de México regresó al color rojo del semáforo epidemiológico, lo que implica el cierre de actividades no esenciales desde el 19 de diciembre hasta el 10 de enero. La medida contempla que los establecimientos solo puedan vender alimentos para llevar y con un horario restringido de 9:00 a 20:00 horas, lo que conlleva que los lugares estén cerrados por la noche el 24 y 31 de diciembre, cuando se celebra la Nochebuena y el Año Nuevo.
La Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac) informó que el cierre obligatorio puede provocar que 80 por ciento de los restaurantes de Ciudad de México bajen la cortina permanentemente. Tan solo al final del año, calculan que en todo el país 450 mil personas de este sector se quedarán sin trabajo.