El Pleno del Congreso local aprobó reformas al Código Territorial para el Estado y los Municipios de Guanajuato en materia de polígonos de actuación.
Con estas reformas se establece que, en la formulación de los programas parciales (que son los instrumentos de planeación territorial que tienen por objeto regular y establecer las acciones de desarrollo urbano en áreas específicas con condiciones particulares) cuando los municipios cuenten con barrios, comunidades o localidades rurales que, por su valor histórico, artístico o por el desarrollo de actividades económicas, sean de importancia para la identidad del Municipio, estos promoverán la elaboración de programas parciales y polígonos de actuación para el crecimiento, mejoramiento y conservación de dichos centros de población.
Al hablar a favor del dictamen, la diputada Lilia Margarita Rionda Salas manifestó que las reformas en comento plantean la creación de polígonos de actuación, a fin de fomentar el desarrollo urbano que permitan llevar a cabo acciones específicas para el crecimiento, mejoramiento y conservación de los centros de población, para la formación de conjuntos urbanos y barrios integrales.
“Son los vecindarios, los barrios, las aldeas, los protagonistas de las ciudades. Ellos dan identidad al territorio y definen la pertenencia una comunidad. Estos espacios no sólo se tratan de delimitaciones geográficas. Les define la cultura, la arquitectura, sus tradiciones y la interacción entre sus vecinos”, enfatizó.
Apuntó que se busca que esa figura promueva un crecimiento coherente, ordenado y que sea compatible con el medio ambiente; y con la reforma se podrán definir como polígonos de actuación áreas factibles de regeneración urbana, zonas industriales que puedan ser sujetas a reconversión, espacios de conservación patrimonial por su valor histórico o cultural, sitios susceptibles de rescate, áreas naturales para el control del uso de suelo.
Rionda Salas destacó que la reforma busca establecer las bases para que desde la planeación local se fortalezcan las capacidades productivas, históricas, culturales y sociales de un territorio determinado con el propósito de mejorar la calidad de vida de sus habitantes.