El grupo parlamentario del Partido Revolucionario Institucional presentó una iniciativa de reforma a la Ley de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia para el Estado de Guanajuato con la finalidad de perfeccionar y ampliar el espectro del ámbito donde se presentan la violencia laboral y la violencia docente, en sector público y privado, así como en todos los niveles del sistema educativo en el estado de Guanajuato.
El diputado Gustavo Adolfo Alfaro Reyes expresó que la violencia laboral es un problema de actualidad, tanto para hombres como para mujeres.
El congresista señaló que aun cuando la iniciativa estaba direccionada a la protección de las mujeres, no se debe olvidar que el problema es integral porque los trabajadores jóvenes están particularmente expuestos a la violencia en el trabajo debido a que a menudo ocupan puestos subordinados, mientras que las trabajadoras jóvenes están más expuestas a la violencia sexual.
Alfaro Reyes comentó que la instalación de nuevos centros de trabajo derivado de las atracciones de inversión, han generado lo que conocemos como ciudades industriales, donde se requiere un gran porcentaje de mujeres obreras que están expuestas en forma constante a la violencia laboral, por superiores, compañeros o bien, por subordinados suyos, por lo que consideraban importante abrir los espectros legales de protección.
El legislador mencionó que se consideraron las opiniones de organismos internacionales, instrumentos y criterios y manuales de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, para poder proponer que la violencia laboral se presenta en ámbitos en los que se produce un exceso o modificación de la jornada laboral, sin remuneración, con la sola finalidad de mantener a la trabajadora más tiempo y lograr su desequilibrio emocional, familiar y a veces hasta psicológico y económico.
Indicó que, además, se puede presentar en cualquier nivel de educación, es decir, desde el nivel inicial o preescolar (kinder) hasta el nivel profesional y de posgrado. Dado que es común que la calificación se asigne debido a exigencias del docente (regalos, cuotas, participaciones, etc.) o bien, condicionar, con invitaciones a salir, comer, cenar, o citas con la alumna a efecto de otorgar la calificación, hasta la agresión verbal o el acoso por vía telefónica o cualquier otro medio de comunicación de la maestra o maestro con las alumnas.
“Estos son ámbitos que consideraban deben ser expresados en la ley a efecto de clarificar y ampliar el espectro de los ámbitos en los que se presente con mayor frecuencia la violencia laboral en contra de las mujeres”, concluyó Alfaro Reyes.
La iniciativa fue turnada a la Comisión para la Igualdad de Género para su estudio y dictamen.