Con el objetivo de fortalecer el marco jurídico que garantiza los derechos de las niñas, niños y adolescentes abarcando los diferentes tipos de familias que existen hoy en día, así como promover la crianza positiva la diputada Martha Edith Moreno Valencia presentó una iniciativa de reforma a la Ley de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes del Estado de Guanajuato.
Al mencionar los motivos de la iniciativa, la congresista señaló la existencia de una gran diversidad de tipos de familias que son capaces de cubrir las necesidades y tareas que conlleva el modelo tradicional de la misma, pero que carecen de legitimidad al no ser aceptadas ni reconocidas en el imaginario social.
“El reconocimiento de los derechos de las infancias y las adolescencias incluye aquel derecho a vivir en familia, en un entorno de afecto y de seguridad. Esto nos lleva a la reflexión de otras realidades, en donde existen diversos modelos familiares que deben ser visibilizados e incluidos en la legislación”, dijo.
La diputada manifestó que la propuesta plantea una mayor inclusión en la visión de la familia y que no sea regida por la heteronormatividad ni limitativa a padre y madre. Sino que se amplié considerando otros modelos, otorgando reconocimiento y legalidad a la diversidad.
También se propone, apuntó, que las autoridades estatales y municipales, en el ámbito de sus respectivas competencias diseñen, implementen y fomenten políticas públicas y programas enfocados a la crianza positiva, que conlleva a una educación con base en el respeto y el apego seguro, rechazando a su vez cualquier tipo de castigo corporal y humillante.
“La finalidad de realizar dichas intervenciones públicas por parte de las autoridades es para alcanzar impactos positivos en el bienestar y desarrollo de las familias y sus integrantes, abogando por una sana convivencia”, comentó.
Finalmente, la diputada concluyó que la iniciativa tiene como finalidad generar un ambiente óptimo que permita el pleno goce de los derechos de las niñas, niños y adolescente, por lo que consideró que no era suficiente con la implementación de programas sobre crianza positiva, sino que era necesario el diseño e implementación de políticas públicas en torno a la crianza positiva para la transformación y alcance de una sociedad más pacífica y justa.
La presente iniciativa fue turnada a la Comisión de Derechos Humanos y Atención a Grupos Vulnerables.