Convocada por la Comisión de Gobernación y Puntos Constitucionales se llevó a cabo una mesa de trabajo para analizar la iniciativa de reforma a la Ley del Trabajo de los Servidores Públicos al Servicio del Estado y de los Municipios que tiene como finalidad establecer la posibilidad de un descanso para aquellas mujeres y personas menstruantes que se vean imposibilitadas de llevar a cabo su jornada laboral a causa de los malestares físicos que pudieran presentarse durante su periodo menstrual.

El asesor del grupo parlamentario del PRI, Uriel Araujo López, comentó que la finalidad es establecer un día de descanso en un mes para las personas menstruantes y que sea aplicado una vez por mes, así como desmitificar que la menstruación es un tema de la esfera privada.

Agregó que es una medida que se ha aplicado en diversos países alrededor del mundo y que conforme se aplique, se estará más cerca de construir espacios laborales más igualitarios y seguros.

En su intervención, Luis Alberto Estrella manifestó que la iniciativa era viable, pero propuso se integre como permiso con goce de sueldo más no un día de descanso; mientras que Carlos Alejandro Rodríguez comentó habría que considerar el impacto económico y la afectación de los servicios que se están dando por parte de las personas menstruantes, pero que se podía otorgar un permiso en caso de que se presenten este tipo de situaciones por parte de sus superiores.

La diputada Susana Bermúdez Cano apuntó que la iniciativa es loable y que a nivel internacional ya en algunos países se otorgan, pero que era importante poner en consideración las inquietudes de los municipios.

Entre los comentarios expuestos por los municipios se señala que se manifiestan en contra por el impacto económico y la continuidad de los recursos públicos a cargo de los gobiernos municipales; que la menstruación puede ser incómoda pero no incapacitante; que las trabajadoras deben contar con un certificado médico; que no se establecen las condiciones o términos en los que debe darse el permiso; y establecer supuestos y condicionantes para hacer uso de ese derecho.

Por su parte, se comentó que el Poder Judicial indica que no están incluidas todas las personas que no sufren ningún inconveniente en su menstruación y que no se especifica cómo operaría el ejercicio de ese derecho.

Jorge Luis Hernández, asesor del grupo parlamentario del PAN, indicó que se debían tener claras las bondades de la iniciativa, pero que no sólo baste a que sea persona menstruante, sino que tiene que haber una cuestión inhabilitante.

Bermúdez Cano afirmó que coincidían con los términos de derecho a la salud y a la igualdad, pero como estaba planteada la propuesta sí se encuentra atendible en el artículo 75 de la misma norma que se pretender reformar y generaría complicaciones administrativas, por lo que instruyó la elaboración del dictamen en sentido negativo.

En los trabajos participaron la diputada Susana Bermúdez Cano y el diputado Gerardo Fernández González. Además, Carlos Alejandro Rodríguez Pacheco de la Coordinación General Jurídica y Luis Alberto Estrella Ortega de la Procuraduría de Derechos Humanos; así como asesores parlamentarios.