Autoridades municipales rindieron honor a Don Samuel Ruiz García a cien años de su nacimiento, este irapuatense se destacó por su lucha en favor de los derechos de los pueblos indígenas. 

 

Rodolfo Gómez Cervantes, secretario del Ayuntamiento de Irapuato, destacó que Samuel Ruiz, se erigió como un constructor de paz en México y en toda América Latina, gracias a su compromiso por los pueblos indígenas y su incansable lucha por la equidad. 

 

“Nos reunimos en este significativo momento para rendir homenaje a un gran hombre y debo de decir, a un hijo ilustre de Irapuato, en el centenario de su natalicio celebramos su vida, pero también su legado y su incansable lucha”, manifestó. 

 

El sacerdote Armando Gracia, agradeció que el Gobierno de Irapuato apoyara con la creación y colocación de una placa conmemorativa en la que se explica de manera breve el legado que ha dejado el exobispo, y que será colocada al exterior de la casa que le vio nacer en la avenida Guanajuato. 

 

“Irapuato, alégrate de tener hijos como Samuel Ruiz García, que sea un ejemplo para todos; mis palabras son solo para agradecer al honorable Ayuntamiento de Irapuato, a su presidenta Lorena y a todo su equipo el que hayan aprobado esta iniciativa de celebrar el centenario de un gran irapuatense”, señaló. 

 

El señor obispo nació el 3 de noviembre de 1924, y a los 13 años ingresó al Seminario Diocesano de León. Fue ordenado sacerdote el 2 de abril de 1949. 

 

En 1959, fue designado Obispo de la Diócesis de San Cristóbal de las Casas, Chiapas, por el papa Juan XXIII, fue consagrado en su catedral en 1960 donde comenzó su trabajo por la paz y el respeto de los indígenas y las minorías.