Poco más de 190 kilómetros es la ruta marcada entre la ciudad de Celaya y la Comunidad El Tepetate, en Victoria Guanajuato; camino que para Titay Flores simboliza emociones que han ido desde nostalgia, miedo, hasta esperanza y motivación por representar una oportunidad de superación personal y profesional.  

La joven es estudiante del octavo semestre de la carrera en Ingeniería Civil en el Campus Celaya-Salvatierra, y una de las 164 personas que han sido beneficiadas con el Programa de Equidad Regional (PER) de la Universidad de Guanajuato (UG). Este busca promover la educación incluyente y está enfocado en llegar a estudiantes procedentes de los municipios con alto índice de rezago, a quienes ofrece apoyo económico y oportunidades de desarrollo personal. 

Titay es originaria de una localidad que en el año 2020 tenía aproximadamente 346 habitantes. Se trata de un lugar caracterizado por su riqueza natural, enmarcada por la flora y fauna que refleja colores cálidos y un cielo azul, el cual parece estar libre de la contaminación propia de la mancha urbana. Esto forma parte de la cotidianidad que la joven ha dejado atrás al emprender su proyecto académico en la Universidad de Guanajuato.  

Sentada en la sala de su casa y acompañada por su mamá, papá y un pequeño gato que merodea el lugar, comienza a recordar su travesía de cuatro años de un trayecto universitario, en el cual desde el primer momento tuvo la fortuna de recibir el apoyo de su familia. 

Con escasas oportunidades para acceder a la educación superior, cuando le ofrecieron ser parte del PER, Titay enfrentó una de las decisiones más importantes para su vida: elegir el programa académico a cursar en la UG.  

Para la señora Fabiola Espínola y el señor Efraín Flores, ver partir de casa a su hija representó un proceso complicado, a los sentimientos de alegría y nostalgia se unió la convicción de que esta oportunidad podría cambiar su vida. 

En su proyecto académico, Titay ha recibido el respaldo familiar: “la animamos a cumplir su meta”, señala su familia, pese a que esta travesía ha implicado enfrentar bastantes miedos. 

La madre de Titay explica que uno de los principales obstáculos a los que se enfrentan las juventudes en dicha localidad para continuar sus estudios de nivel superior es contar con solvencia económica para cubrir la estancia en otra ciudad. Por ello, es común que opten por adaptarse a las opciones educativas de la región, las cuales no siempre responden a su interés profesional o a sus aptitudes.  

Ante estos escenarios, la señora Fabiola expresa con gratitud que: “Da orgullo que esté ahí, porque es una de las mejores universidades del país (…) es una escuela de prestigio, y me da gusto que forme parte de eso porque le ayuda a ella”. 

Los semestres han pasado y con ello también vinieron diversos escenarios a los que Titay se tuvo que enfrentar, la pandemia fue uno de ellos. Durante este periodo, la joven optó por regresar a casa de sus padres e invertir con el apoyo de la beca en la conexión a internet para poder conectarse a sus clases. 

Fue entonces que las clases impartidas de la UG extendieron de manera inimaginable sus fronteras. La Universidad estaba en su hogar; aquel lugar en el que parecía imposible acceder a la educación universitaria, se convirtió en una de las tantas “aulas” virtuales durante casi dos años de confinamiento. 

Titay ha regresado a la presencialidad. Afirma que lo ha hecho con más seguridad personal de la que tuvo hace cuatro años y con el aprendizaje que le ha dejado pertenecer al programa.  

Por su parte, el señor Efraín, expresó que el motivar a su hija a continuar con una carrera es una manera de aportar a una mejor sociedad: “No hay mejor forma de tener mejor sociedad que el estudio, que la escuela, el poder prepararse, así formamos parte de una sociedad mejor”. 

En el Programa de Equidad Regional ya suman cinco estudiantes provenientes de Victoria, y Titay está consciente de que representa un ejemplo de motivación para su comunidad y municipio. “La Universidad de Guanajuato me dio la oportunidad de estudiar, toda mi vida voy a estar agradecida con ello, espero ser siempre UG”.